Universo a distancia

Existe un universo polisemántico. En él reside la katártica Galaxia kiaresca. Este universo se contrae y se expande intermitentemente. Desde tan enigmático punto se pueden apreciar violentas nebulosas y excéntricos anillos que juegan a cuestionar las leyes del universo. Incautos exploradores magentas han llevado peripécicas excursiones, sin reportar cambios de tristésica alegría, de fracasoledad. Los únicos moradores son cansadas líneas, enredaderas de colores rojos y quemados que se exaltan y multiplican al más mínimo indicio de movimiento –francamente sincronizado- de los focos invisibles. Si se tiene a la mano un telescopio virtual, es preciso avistar según recomienden los enterradores, su impredecible movimiento.




El sofá tiene pensamientos suicidas.
Harto en cada costilla de madera que nadie se siente en su comodidad.
Él quería iluminar la sala,
ser el consentido de las visitas,
la cama del gato,
el captor definitivo de la tranquilidad del medio día.

Pero el sofá esta solo,
ítem único y olvidado de un juego de tres.
Se siente triste, ávido de calor humano.
Lo adornan regularmente
seis cojines igual de olvidados
y un par de calcetines depresivos.

Nadie lo quiere, es cierto.
Arrumbado en un cuarto lúgubre,
Inservible.

Siempre que algún inadvertido se sienta en él
se queja, se mueve trabajosamente de lado a lado,
no se acomoda.
A menudo lo miran con desprecio y se resuelven por el preferido de moda (que en estos tiempos es el piso).

El sofá tiene pensamientos suicidas y yo también.
Elegidos de nadie. Hoy es nuestro día.

1 comentario:

Anónimo dijo...

elegidos de nadie!!! yo los elijo!!!